La necesidad en ciertos casos de prótesisdentales con bases de material blando, obliga a la elección del tipo adecuado. MOLLOPLAST B es un material de rebase blando, a base de siliconas, especialmente elaborado para la prótesis dental. Bajo todos los conceptos responde a las necesidades de la odontología.
MOLLOPLAST B se presenta con la consistencia adecuada para su inmediato uso y puede ser prensado simultaneamente con el acrilato en las prótesis nuevas; también se puede añadir directamente a prótesis ya existentes.
Después del endurecimiento, proporciona una base protésica blanda, como de goma y altamente elástica, la cual permanece absoluta y fuertemente unida al acrilato.
Se embebe superficialmente con la saliba y debido a su gran elasticidad, durante la masticación se adhiere a la mucosa bucal merced a la película salival en los límites de la base protésica, tan importante para la sujeción.
Es fisiológica, no lesiona la mucosa ni produce ninguna irritación. No puede presentar ninguna modificación ni expanción de la base, ya que no contiene ninguna clase de substancias susceptibles de embeberse.
No contiene substancias reblandesedoras, ni internas ni externas, por lo que no es posible que aparezca un endurecimiento de la base por envejecimiento del reblandecedor. El MOLLOPLAST B no es atacado ni por la saliva ni por los gérmenes. Resiste toda clase de modificaciones del medio bucal, conservando su resilencia y elasticidad intactas durante muchos años.
Su empleo está ventajosamente indicado en:
Crestas óseas agudas consecutivas y preparaciones preprotésicas deficientes, en maxilares inferiores atrofiados para evitar roces por decúbito o para acolchar la prótesis en la zona del foramen mentoniano, asegurando la fijación de las prótesis inferiores.
Las prótesis rebasadas con este material blando facilitan enormemente la adaptación, ahorran mucho tiempo de retoques y proporcionan al paciente un mayor confort, a la vez que permiten una mayor presición masticatoria.
Indicaciones:
Los dientes IVOCLAR utitlizados para la fabricación de este tipo de prótesis están construidos con resinas reforzadas con partículas inorgánicas (cuarzo, sílice) que le proveen a los mismos una mayor resistencia a la abrasión mecánica como así también una estética superior. La selección de los mismos se determina en base a una carta de formas (que posee tres formas básicas: cuadrada, triangular y ovoidea), una guía de colores completa y una tabla de medidas que permite a partir de una medida conocida poder calcular todas las demás.
La sobrevida estimada para las prótesis completas va de 3 a 5 años dependiendo de la tasa de reabsorción individual de cada paciente, que se estima en promedio de 0.9 a 1.2 mm por año. Al cabo de dicho plazo se produce una reabsorción en bloque tridimensional que conduce a la pérdida de la eficacia masticatoria por desadaptación basal.
El esquema oclusal propuesto para este tipo de prótesis completas es el conocido como "oclusión balanceada bilateral" que permite a la base protésica mantenerse firmemente unida a la mucosa oral durante los movimientos masticatorios, aumentando la sujeción y estabilidad protésica.
A comienzos del nuevo siglo irrumpieron en el mercado odontológico argentino diferentes materiales para realizar prótesis flexibles (que como detallaré no son todos iguales) llegando a tener un boom allá por el año 2004, donde muchos colegas tuvieron a su disposición una gran cantidad de materiales distintos, muchos de una calidad discutible, y muy poca información; y debido a los fracasos, hoy muchos colegas desistieron de su utilización, aunque otros supieron diferenciar a los materiales de buena calidad y hoy siguen con muchos éxitos utilizándolas.
El gran problema de las prótesis parciales removibles de acrílico o prótesis de cromo cobalto, es la falta de estética que aportan los retenedores colados o labrados, sobre todo cuando tienen que actuar en zonas visibles de la sonrisa (caninos y premolares), generando en el paciente un efecto psicológico contrario, viéndose limitado a la hora de sonreírse, más teniendo en cuenta que vivimos en una era donde la estética es fundamental.
Limpieza habitual con cepillo para prótesis y jabón no abrasivo con antiséptico (p. ej. Espadol) ya que los materiales abrasivos rayan fácilmente la superficie. Descontaminar en Hipoclorito de Sodio 1:9 Agua durante 30 minutos
Lo anteriormente descripto es producto de investigaciones y experiencia de más de 5 años, concluyendo que de este material para prótesis debemos explotar la estética que brindan los retenedores y no tanto la flexibilidad, la que a mi entender la debemos reducir bastante brindando una prótesis que en casos de extremos libres ceda levemente ante cargas oclusales, reduciendo el efecto de palanca nocivo sobre los diente (rompefuerzas) pero no sobrecargando el terreno desdentado. La combinación con esqueléticos de cromo cobalto ofrece excelentes propiedades y resultados.